Al principio de cada carrera tendremos que esquivar a otros vehículos, que irán tanto en nuestra dirección como en dirección contraria. Chocarse contra los primeros nos quitará 'salud' y ralentizará un poco, pero colisionar contra los segundos hará que se termine la partida.
En cuanto consigamos llegar lo suficientemente lejos, dejaremos atrás el tráfico y nos enfrentaremos a retos aún más complicados, como aviones que irán soltando enormes bloques de cemento en nuestro camino.
Durante las carreras podremos ir recogiendo bloques amarillos, con los que al terminar, podremos adquirir nuevos vehículos. Cada uno de los coches tiene sus propios atributos, y por supuesto los mejores serán los más caros.
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