La compañía dice que Ballmer seguirá siendo el director general hasta que se nombre a su sucesor. Curiosamente, Ballmer dice que Microsoft necesita un líder que vaya a estar aquí a largo plazo. Aquí sus palabras:
"Nunca hay un momento perfecto para este tipo de transiciones, pero ahora es uno bueno. Nos hemos embarcado en una nueva estrategia con una nueva organización y tenemos un equipo sénior de liderazgo increíble. Mis pensamientos originales se inclinaban por situar mi retirada hacia la mitad de la transformación de la compañía hacia una más orientada a los dispositivos y los servicios. Para este cambio de dirección necesitamos un CEO que vaya a estar aquí a largo plazo".
Por el momento no hay demasiados detalles al respecto, y un de los pocos detalles de la nota de prensa emitida por la compañía, es que se trata de una decisión voluntaria del propio Ballmer, que simplemente decide retirarse.